lunes, 24 de febrero de 2014

¡Me caso! (Parte 2)


           ¡Hola amigos!
           Continuamos  con la serie ¡Me Caso! enfocándonos  ahora en cuestiones más entretenidas.
           Recuerden que deben considerarse las opiniones de ambos contrayentes, pues a veces se piensa que la novia es la que escoge todo, y recuerda que también es matrimonio de él y la casa en que también vivirá.
           Cuando amueblamos nuestro hogar, mi esposo y yo nos dividimos los espacios: él seleccionó la sala, yo el comedor y entre los dos la recámara.
           Hay que ir aprendiendo a negociar a partir de ahora.
           Entrando en materia, una vez que checaste lo más importante, que es dónde vivirán, sus muebles y el presupuesto y fecha para la boda…

ü  Hay que elegir la iglesia y el salón para el banquete o reunión posterior.
ü  Además deben acordar qué ministro presidirá la ceremonia.
ü  Y aquí viene uno de los más importantes elementos de la boda: ¡El vestido de la novia!

 Sería bueno que cheques un diseño clásico (junto con el peinado y el maquillaje) para que trascienda en el tiempo y cuando pasen los años, al ver las fotos, no parezca de inmediato en qué década te casaste ;)

Hay excelentes diseñadores en la ciudad que crean un modelo exclusivo según tu forma corporal para hacer resaltar tus atributos y disimular lo que no te favorece, y lo mejor, es que es gratis, el vestido a precios accesibles y hasta lo puedes pagar a meses sin intereses.

ü  El velo o tocado, los zapatos y la joyería con los que complementarás tu atuendo.
ü  Los  ramos artificial (para la novia) y natural (para aventarlo), el lazo, las arras, la Biblia, la vela, etc.
ü El traje o smoking del novio (comprado o rentado). Hay muy elegantes modelos a escoger en las dos opciones.
Los zapatos, corbata o moño, mancuernillas y pañuelo, deben ir ad hoc con lo anterior.
    
Cuida el arreglo de tu cabello  más o menos una semana antes de la boda para que se te vea
natural, no recién cortado.


ü ¡Los anillos! Además del modelo, chequen si quieren un grabado en especial al reverso.

ü  Acordar los testigos y los padrinos de las bodas y hacer citas para comunicarles personalmente sobre su deseo de requerir su presencia especial ese día.
ü Definir si deseas damas que te acompañen y el color de sus vestidos y el modelo.
ü Elegir el hotel donde pasarán la noche de bodas.
ü El atuendo y lencería que usarán para esa gran noche, obvio que irán de compras separados. J
ü No creas que olvido la luna de miel, según los compromisos laborales y la economía, deciden el lugar y el tiempo que durará.

     Recuerden que este tiempo es para pasar juntos, para que disfruten y no andar de turistas todo el día.

     Es importante que si viajarán al extranjero, revisen si se necesitarán visas u otros requisitos para ingresar a otra nación.

ü Escoger la ropa según los lugares que visitarán, hay que checar el clima.
ü Hacer cita con ginecológica, pues es necesario hacerse revisión los dos de su estado de salud y orientarse sobre los métodos anticonceptivos más convenientes, según hayan acordado el tiempo de llegada de los hijos, si Dios se los concede.
   
    ¡Cuántos detalles! ¿verdad? Pues por qué crees que estoy escribiendo estos artículos J
   
    Quiero hacer presente que consideren que esos días serán únicos, así que, si es posible, pide ayuda  a algunas personas de tu confianza que estén al pendiente de sobre todo de celebración religiosa y el banquete, para que ustedes puedan gozarse, posar para muchas fotos y compartir con sus invitados.
     ¡Nos leemos en la próxima!

     Te dejo el link del artículo anterior: ¡Me caso! Parte 1

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