miércoles, 19 de febrero de 2014

¡Me caso!


 La mayoría de las mujeres soñamos con el día en que el príncipe azul que anhelamos pregunte: “¿Quieres ser mi esposa?“

Y luego del “Sí”… ¿qué sigue, qué debemos planear y convenir?

Muchas quieren  la boda de sus sueños, otras lo que quieren es ¡casarse! y no les importan los detalles por las que las primeras sufren y pelean. Y las dos son válidas, y si tienen los recursos para hacerla ¡adelante!

Obviamente que si estamos pensando en que me casaré hasta que tenga dinero para todo, pues nunca nos casaríamos, pero sí he conocido varias parejas que inician esta importante etapa con deudas hasta el cuello por varios años a causa de hacer una fiesta y ceremonia fuera de su alcance económico real. Esto es lo que quisiera tratar de prevenir. Y si de por sí hay un periodo de adaptación entre los cónyuges, hay que tratar de que pase lo mejor posible sin este tipo de contratiempos.

Los artículos que compartiré contigo, se tratarán de una lista de detalles que puedes considerar según tu estilo y el del novio para que todo salga de maravilla y no se te escape nada. No significa que vas a hacer todo lo que te indicamos en ella, sino que de aquí elegirán lo que les agrada.

¡Comenzamos!

 Ø  Determinar el presupuesto de la boda y luna de miel, platicando aquí quién pagará  y de qué forma (crédito, efectivo, mensualidades, etc.)
 Ø  En qué tipo de casa vivirán (departamento o casa; comprado (a) o rentado (a) -estimando el enganche o depósito según elijan-) y en qué lugar.
 Ø  Comenzar a checar precios de muebles y artículos para su futuro hogar.
 Ø  En base a esto, definir un aproximado de cuántas personas serán invitadas (pueden ir haciendo una lista).
 Ø  Acordar la fecha y hora de la boda civil, de la ceremonia religiosa y los días de la luna de miel. Hay que considerar, si trabajan, si hay compromisos laborales relevantes, permisos y vacaciones).
 Ø  Organizar la pedida de mano o fiesta de compromiso.
 Ø Para la boda civil:

o  Si desean que sea el mismo día que la ceremonia religiosa o en uno distinto.
o   Conversar si prefieren que sea en la oficina correspondiente o en un lugar especial (si es en este último, considerar la decoración).
o   Investigar costos en los dos casos señalados.
o   Informarse sobre los documentos y análisis médicos requeridos por la autoridad.
o   Acordar el régimen patrimonial por el cual se van a casar.
o   Vestido, maquillaje, peinado y accesorios si es en fecha distinta a la celebración eclesiástica.
o   Traje para el prometido.
o   Invitados para la ceremonia civil.
o   Checar si habrá un brindis, canapés o comida especial después del casamiento y en dónde.

¿Cómo van, emocionados? Bueno, pues hasta aquí dejamos por hoy.
Llegará el día que estarán en el altar, sus ojos se encontrarán y frente a Dios harán el juramento de amor para siempre, ustedes han tomado la decisión de a quién amarán. ¡No se aceptan devoluciones! J

¡Los espero en la siguiente entrega!


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

¡Anímate a comentar! Tu opinión es importante.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...